La gobernanza con Internet es un fenómeno complejo que requiere un sosegado análisis sobre el comportamiento que practicamos los individuos en la red cuando disponemos de herramientas que nos permiten reaccionar ante determinadas situaciones,
Es cada vez es más frecuente encontrar, tal y como esta sucediendo en la defensa del caduco modelo del Copyright, ejemplos de como un movimiento lanzado por activistas en Internet son capaces de ganarle la guerra a iniciativas gestionadas por potentes grupos de poder económico, mediático y político.
La explicación a este fenómeno la he encontrado de la mano de Josep que me ha pasado el enlace a este magnifico articulo sobre “El ordenador que ganaba los Juegos de Guerra escrito por Kiko Llaneras en su Blog En silicio hablando de Inteligencia Artificial.
La estrategia que descubrio el programa de Inteligencia artificial que había desarrollado el Ingeniero Douglas Lenat, que él llamaba Eurisko y que como habrás leído consistía en desplegar flotas con millones de pequeños barquitos.
Lenat introdujo las reglas en su programa y dejó que éste buscara la mejor estrategia por si mismo. No le dio consejos ni le sugirió tácticas. Durante un mes Eurisko se ejecutó cada noche en cien ordenadores —ordenadores de 1981 en busca de una estrategia óptima.
Cuando llegó el torneo la mayoría de participantes desplegó alguna variante de una flota tradicional, con naves de diferente tamaño y todas bien defendidas. Eurisko planteó una estrategia diferente: gastó su billón de dólares en un número astronómico de pequeños botes, con armas poderosas pero sin defensa ni capacidad de movimiento.
Sus barquitos estaban ahí parados, abriendo fuego con sus enormes cañones, hasta que recibían el primer impacto y se iban al fondo. Pero no importaba porque eran legión.
Las reglas cambiaron al año siguiente para penalizar el tipo de flota que había dado la victoria a Lenat, ahora las naves no podrían permanecer estáticas porque un criterio para ganar era la agilidad. Pero Eurisko volvió a sorprender con su estrategia: cuando una de sus naves era dañada, ésta se hundía a si misma y así la flota recuperaba agilidad. Por supuesto, Eurisko ganó de nuevo.
Internet es el proceloso mar que nos ha permitido, por primera vez en la historia, navegar con libertad. Cada persona, cada individuo, podemos convertirnos en un barquito comprometido con una causa en la que la red se comporta como una gran herramienta de "inteligencia" en favor de quienes saben utilizarla.
Ante esta nueva situación las grandes flotas siempre pierden. Pueden cambiar las reglas del juego, tal y como han hecho en la Ley de Economía sostenible, puede que ganen alguna que otra batalla, tal y como sucedió con el Canon Digital, pero seguro que pierden la guerra de los derechos y de los valores.